Porsche 917: Un coloso aún invicto

Creado: Lun, 26/10/2009 - 16:44
Créditos
Jorge Esténger Wong

El 13 de marzo de 1969, hace 40 años, Porsche presentaba en el Salón de Ginebra su modelo 917. Era un super-deportivo de carreras que ha pasado a convertirse en uno de los coches de competición más aclamados y exitosos de la historia, tanto que en su día la normativa de muchas pruebas fue alterada para impedir la participación de los 917, tal fue el caso del Racing Series World Championship (algo parecido a las LeMans Series actuales) o las CanAm Series canadienses. Pero vayamos a los inicios.

El 917 nació en 1969 al amparo de una normativa extendida de la FIA para coches de menos de cinco litros de cilindrada y un mínimo de 800 kg de peso. Porsche puso manos a la obra y en el mismo año ya habían producido 25 unidades bajo la supervisión de Ferdinand Piëch: justo las necesarias para poder participar en el Campeonato del Mundo. En la temporada 1969-70 de las diez carreras del campeonato, ¡nueve! fueron ganadas por los Porsche 917: un debut arrollador. Su éxito se basó en un excepcional chasis, un brillante motor y una avanzada aerodinámica, sumados al talento de los pilotos. El 917 estrenaba innovadoras soluciones en todos los sentidos, empezando por el motor: un 4.5 litros refrigerado por aire de 12 cilindros horizontales (no un motor técnicamente bóxer) capaz de desarrollar la galáctica potencia, para la época, de 520 CV.

La aerodinámica estaba especialmente cuidada, de hecho se llegaron a construir diferentes versiones para maximizar el rendimiento en este aspecto. La primera de ellas (de cola corta)estaba diseñada para circuitos revirados, donde era necesario un fuerte apoyo aerodinámico para maximizar el agarre. La segunda versión poseía una zaga más larga, (denominada de cola larga) y su misión era alcanzar elevadas puntas en circuitos muy rectos. En las 24 Horas de LeMans de 1971 un 917 de cola larga alcanzó una velocidad de 387 km/h en la recta Mulsanne, todo un récord en la época. En la misma prueba el 917 pilotado por Gijs van Lennep y el Dr. Helmut Marko logró mantener una velocidad media de 222 km/h cubriendo una distancia total de 5.335 km, otro récord aún vigente. La colección de éxitos de este super-deportivo de chasis tubular de aluminio y carrocería de fibra de vidrio parecía no tener fin, pero al final de 1971 la FIA cambió la normativa y el 917 no pudo seguir compitiendo. Las miras de Porsche se trasladaron entonces a la competición canadiense CanAm Series. Pero esa será otra historia: la veremos la próxima semana.

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Jorge Esténger Wong