Toyota Hachi-Roku, el Corvette japonés

Creado: Dom, 21/10/2012 - 13:57
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Jorge Esténger Wong
Toyota Hachi-Roku, el Corvette japonés

La industria automotriz japonesa no solo se ha hecho de un sitio en la producción actual de vehículos, sino que ya posee una historia propia, donde podemos encontrar modelos como el Toyota Hachi-Roku, todo un motivo de culto, al puro estilo de los Corvette o el Porsche 911.

En 1983 Toyota se encontraba lista para dar el gran salto que la convertiría en la potencia automotor que es hoy. Se había consolidado en varios mercados y ya era conocida en todo el mundo. Ese año, la marca nipona presentó una versión de su establecido modelo Corolla, que haría época por su endemoniado comportamiento. Se trataba de un vehículo ligero, el cual lograría unos performances de espanto, gracias a su reducido peso y exuberante potencia. Es común referirse a este vehículo como AE86, por la denominación que usaba Toyota para su chasis, siendo la sexta revisión de la quinta generación del modelo, la cual era la E80. De ahí el referente de Hachi-Roku, que no es otra cosa que Ocho-Seis, en japonés. Pero bueno, vamos a lo nuestro, ¿qué tiene este auto tan especial?

El Hachi-Roku en detalle


Como es lógico, fueron necesarios una serie de factores para que el modelo se convirtiera en un mito. Pero, sin dudas, el primordial es su rendimiento supremo, debido a toda su configuración y diseño. El Hachi-Roku es el último Corolla de tracción trasera, lo cual combinado con su bajo peso y potente motor lo hizo popular en Japón, donde resultó ideal para las apretadas curvas de las carreteras de montaña japonesas. Sobre la plataforma del AE86 se podían montar dos estilos de carrocería el Levin y el Trueno. En ambos casos existían varias configuraciones acorde al número de puertas y otros detalles, siendo la principal diferencia los faros, que en el segundo eran abatibles. Poco se le ha dedicado a su interior, tipos de butacas o instrumentos, la historia de este auto, como debe ser, está en su mecánica.

El motor del Hachi-Roku evolucionó en su tiempo de vida, pero siempre fue una máquina respetable. El más emblemático resultó el 4A-GE, con el cual Toyota incorporó la configuración de cuatro válvulas por cilindro. Este motor debió vencer el escepticismo de muchos que dudaban de su block, el cual no ofrecía un aspecto más robusto que el de su antecesor. Ciertamente, eso era así, pero el especial cuidado de Toyota en su desarrollo y producción terminaron logrando una máquina que entregaba 120 CV de potencia, con apenas 1 500 cc de cilindrada. Más de veinte años después, a comienzos del nuevo milenio, muchos motores de 2.0 L aún ofrecían similar cota. Al combinarse a los apenas 940 Kg de peso (y solo 910 Kg en el pequeño coupe) del auto entonces se lograba una velocidad de hasta 193 km/h y una aceleración de 0 a 100 km/h en apenas 7.1 s. Mención aparte para el desarrollo por Toyota Racing Development (TRD) de motorizaciones realmente temibles del AE86. La versión TRD constaba con un motor 4AGE 20v de 220 CV@10 000 rpm y un torque de 19.2 kgm@7 800 rpm. Existió una versión de este motor, para el Grupo A de competición, que tenía la impresionante potencia de 240 hp@11.000 rpm. ¡Este era un bólido!

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Jorge Esténger Wong