Hace unos días reseñamos aquí el Mustang GT, el auto usado en la mítica escena de Bullit. Hoy, como prometimos, nuestro espacio será para el “malo” de la película: El Dodge Charger 1968, perseguido hasta la muerte por Mc Queen.
El primer Charger salió a la venta en 1966 y se distinguió por sus luces frontales escamoteables, luces traseras a todo lo ancho y un motor base V8 de 5.2 l y el bestial Hemi de 7.0 l, como opcional.
El Charger fue rediseñado para 1968, con varios cambios de apariencia. Así, se sustituyeron las dos luces traseras redondas por horizontales anchas y se incorporó de una moldura horizontal a la parrilla. Se mantuvieron los motores de 1967 y, a mediados de año, llegó el seis en línea de 225 pulgadas cúbicas (3,7 L).
El Dodge Charger 1968 que mostramos aquí, fue exhibido justo al lado de un ejemplar del Mustang GT 1968, en el Miami International Auto Show, haciendo una dupla espectacular. Como dijimos en el trabajo anterior, ambos son propiedad del mismo dueño, quien los ha restaurado para coincidir exactamente con los utilizados en la película.
Este vehículo vino con un motor V8 de 383 pulgadas y cambio automático, pero ahora lleva un motor de 500 CV, luce pintura negra con techo de vinilo y tapacubos, y hasta replica de la matrícula RDR 838. Es difícil asegurar que el Charger perseguido era en verdad automático, aunque la banda sonora simulaba cambios drásticos de revoluciones, como en los cambios manuales, sin que viéramos a los protagonistas ejecutarlos. Era, sobre todo, un efecto dramático para hacer la escena más espectacular. Fueron 10 minutos y 53 segundos de pura adrenalina, en una escena que definió las persecuciones en el cine
Por último, decir que, a diferencia del Mustang, nunca se ha tenido total certeza de lo sucedido con el ejemplar sobreviente, pues uno fue destruido en la explosión de la gasolinera, de los dos Charger utilizados. Ambos eran originalmente amarillos y fueron repintados a negro para el filme. En 2008, un entusiasta de Mopar presuntamente lo encontró y por las huellas de los montajes para las cámaras de filmación, la pintura amarilla original bajo la negra y otros detalles asumió su identificación y, aunque esto no constituye una prueba definitiva, el vehículo, ya restaurado, fue exhibido junto al Mustang Bullit original en 2018, en el Goodwood Festival of Speed.
