Le Tourneau, una de las grandes Compañías dedicadas a maquinaria pesada y movimiento de tierra. Fue la última en aparecer entre las grandes de su época, ganándose un lugar destacado por sus tecnologías.
A fines del Siglo XIX, el auge de las construcciones industriales y de infraestructura en Norteamérica necesitaba de empresas capaces de asumir ambiciosos proyectos que, por su magnitud, requerían de obras ingenieras donde los movimientos de tierra para convertir lugares vírgenes en fábricas e instalaciones diversas, demandaba maquinaria de dimensiones, a veces colosales, capaces de transformar esos espacios.
Surge así una de las mayores compañías de ese tipo; la Bucyrus en 1880, convertida en 1927 en la Bucyrus-Erie, cuando absorbe al mayor fabricante de pequeños equipos, la Erie Steam Shovel Company. Como muestra de su poderío, una de las obras en que participó de forma destacada, fue la construcción del Canal de Panamá. A esta compañía, se sumaba el 15 de abril de 1925, en California, la Caterpillar, otra de las grandes entidades dedicadas a estas actividades.
A pesar del espacio ocupado por estas dos grandes compañías, en 1929, Robert Gilmour LeTourneau crea, también en California, una entidad con ese perfil de operaciones pero con una característica distinta; sus equipos se movían sobre neumáticos y no sobre esteras (orugas), como sus rivales. Este perfil aplicaba a todos los tipos; tractores, bulldozers, motoniveladoras, paleadores frontales, perforadoras, etc. Ello le permitía una movilidad superior en tareas donde el movimiento sobre neumáticos era la única opción efectiva de trabajo.
La crisis financiera de 1929 comenzaba y se extendía por toda la década posterior. La compañía, con sus adelantos tecnológicos, logró crecer y adueñarse de una parte considerable del mercado. Cierto es que como paliativo a la crisis, el gobierno de EE.UU. desarrolló obras de infraestructura donde los movimientos de tierra eran un requisito indispensable para la construcción de carreteras y obras donde los equipos de Le Tourneau se mostraban con ventaja. Ello le permitió a la compañía rebasar el período de Crisis y llegar a los momentos de la II Guerra Mundial.
El escenario Europeo donde esta se desarrolló en sus inicios, facilitó sobremanera la participación de los automotores Le Tourneau en los suministros de equipos, aportando el 70 % de todos los que los Aliados emplearon durante el Conflicto. Terminado este, su posición de Mercado se mostraba pujante y aportó distintas novedades como fueron la primera perforadora vertical autopropulsada en 1954 y al año siguiente la primera estibadora/cargadora de bolos de madera. Para 1965 nos mostraba lo que hoy conocemos como Straddle Carrier, ese equipo abundante en las Terminales de contenedores en forma de U invertida, capaz de cargar éstos y trasladarlos abrazados entre sus dos torres móviles.
Desde inicios de los años 50, la Compañía desarrolló sistemas de tracción diésel-eléctricos, donde los primeros alimentaban generadores que proporcionaban la electricidad a cada rueda motriz, evadiendo las cajas de transmisión, diferenciales, etc, El principio era similar al usado por las conocidas locomotoras diésel-eléctricas en el ferrocarril. Una utilización práctica del Sistema fue la construcción del llamado TC-264 Snow Buggy, utilizado en zonas del Ártico donde la construcción de caminos convencionales o Ferrocarril, era prácticamente imposible.
El nuevo equipo se consideró en su tiempo el mayor Todoterreno del mundo, siendo utilizado en tareas específicas en Alaska. Constaba de seis unidades sobre neumáticos, incluida la locomotora. El conjunto medía 274 pies de largo y cada carro se movía sobre cuatro ruedas que incluyendo el neumático alcanzaban los 7.3 pies de alto. Las 24 ruedas del conjunto eran movidas por dos motores Cummins de 400 hp. c/u. Cada carro podía transportar 150 t. El sistema demostró ser capaz de realizar las transportaciones sobre cualquier tipo de terreno; congelado, fangoso, irregular, etc.
Después de 40 años al frente de su conocida compañía, el 1º de Junio de 1969, fallece Robert Gilmour Le Tourneau. Un año después, la Compañía es absorbida por la Marathon Manufacturing Company y es denominada como Marathon Le Tourneau Company.
A partir de 2011 y después de ser fragmentada y vendidas algunas de sus divisiones, Le Tourneau Technologies pasa a formar parte de Joy Global, una entidad reconocida en el sector de maquinaria pesada y minería; por unos pocos años, pues la conocida Komatsu, mediante su Holding Komatsu Limited, se hace cargo en 2017 de la Joy… y de los últimos remanentes de Le Tourneau, agregando un nuevo valor a esta entidad japonesa; solo segunda de la Caterpillar en el Sector de Maquinaria para el movimiento de tierra. Sin dudas, una buena adquisición.
