Evite estafas y baje costos de mecánicos y talleres
Comprar un auto y casarse son caminos que, aunque nada tienen que ver uno con el otro, se parecen más de lo que uno cree. En la luna de miel y en los dos primeros años ningún problema, o problemas menores fácilmente resueltos por la comprensión –en el caso de las mujeres- y por la garantía si hablamos de automóviles. Luego de dos años empiezan los grandes problemas y lo más aconsejable es cambiar el auto y la mujer. ¡Mentira! Es una broma.