”La única estrategia de FIAT es vender coches“, sostiene tranquilizador Sergio Marchionne, administrador delegado de la empresa y gran oráculo del sector automovilístico, para acallar los rumores y justificar por qué el fabricante transalpino producirá en Serbia su nuevo monovolumen, llamado Lo.
No obstante, Italia en pleno está patas arriba la noticia dado que dicho modelo debía fabricarse supuestamente en la planta de Mirafiori. Y es que según apuntan varias versiones periodísticas, la emblemática Fabbrica Italiana di Automobili Torino estudia trasladar parte de su producción hacia el país balcánico a mediano plazo, para ponerse a cubierto de la crisis económica y recortar gastos, aunque la mudanza costaría, ni más ni menos, que la friolera de 1 000 millones de euros, de los cuales 350 millones provendrán de la casa turinesa, 400 millones del Banco Europeo de Inversiones y 250 del gobierno de Belgrado.
Sobre esto, Marchionne explicó en declaraciones a la prensa que el traslado es porque la firma tiene un plan ”insostenible social y económico“, pese a que solo hace unos días anunció que había abandonado sus números rojos ganando 113 millones de euros en el último trimestre.
Cabe recordar, sin embargo, que Fiat prevé duplicar su producción en su país antes de 2014, si bien su Consejo de Administración aprobó separar al grupo automotriz de su división Fiat Industrial, que abarca las actividades de Iveco y CNH y que en los próximos meses incursionara en la bolsa de Milán como una empresa independiente. De ahí que, en cualquier caso, solo queda esperar para ver cómo termina esta nueva jugada.