Las marcas alemanas continúan liderando la industria automotor. Si bien es cierto que la brecha que las separaba del resto ha disminuido, aún muestran un carácter y una fuerza que las distinguen con toda nitidez. BMW da otro paso en este sentido al presentar el Concept Active Tourer, un prototipo que mantiene la imagen clásica de la marca, engarzada con todo éxito en la filosofía que rige el diseño actual.
Se trata de una propuesta de monovolumen de hasta 4.35 m de largo, unos 1.83 m de alto y 1.56 m de alto.Lo más importante del nuevo BMW es su propulsión, híbrida, liderada por un motor de gasolina —acoplado al eje delantero— y otro eléctrico, al eje trasero. El de gasolina es una máquina completamente nueva, de tres cilindros y 1.5 L de desplazamiento. Lleva la tecnología Twin Power Turbo, por lo que está sobrealimentado, mediante un turbocompresor de doble entrada Twin Scroll, utiliza inyección directa, y un sistema de distribución variable de la alzada de las válvulas que BMW llama VALVETRONIC. Con todo este despliegue se logra una potencia conjunta de 190 CV.Según BMW, el consumo medio de combustible es inferior a 2.5 L cada 100 km y se pueden recorrer más de 30 km utilizando exclusivamente el motor eléctrico. Además, existe una función denominada BOOST que permite aumentar la potencia temporalmente, si las circunstancias exigen acelerar con mayor fuerza.
La batería que provee de energía al motor eléctrico está colocada debajo del piso del maletero, es de iones de litio y se puede recargar desde una toma de corriente de 230 voltios, utilizando la energía cinética de las frenadas o a través de un alternador accionado por el motor de combustión. Como en otros modelos de BMW, el sistema gestiona la carga y el uso de los motores en función de la información que recibe del navegador o de la situación del tráfico. El Concept Active Tourer posee tres programas de conducción: «CONFORT», «SPORT» y «ECO PRO». En este último, cuando no se ejerce presión sobre el pedal del acelerador, se desconecta el motor de combustión y se desacopla de la caja de cambios. Esto sucede a velocidades entre 50 y 160 km/h.
Otro detalle es el techo, de cristal, el cual se puede oscurecer a voluntad, pulsando un botón para disminuir la radiación que entra en el habitáculo.Este sistema, que BMW denomina Cool Shade, logra este efecto gracias a una serie de partículas en suspensión en el techo que cambian su disposición en función de los impulsos eléctricos que les llega. Además, tiene la posibilidad de crear diferentes gráficos decorativos.