Honda busca fortificar su presencia en China —no por gusto el mayor mercado automotriz del mundo en la actualidad— y para duplicar sus ventas allí en 2015 con respecto al 2011, ha anunciado ya que durante los próximos tres años lanzará en el gigante asiático no menos de diez modelos nuevos.
Entre ellos, con tal de registrar ese incremento de matriculaciones, el constructor japonés prepara el arribo para este año de tres híbridos, con los Honda CR-Z, Insight y Fit (Jazz) equipados con el sistema IMA (Integrated Motor Assist); en tanto prevé arrancar también su fabricación en el país para reducir los costes de producción y popularizar ese tipo de coches entre los clientes chinos.
La compañía señaló, además, que en su estrategia a medio plazo para ganar terreno en ese mercado centrará sus esfuerzos para adaptar sus automóviles a las necesidades y exigencias de los clientes locales, incluyendo a la marca Acura con los modelos NSX, ILX y RDX, y la introducción de vehículos con nuevos motores de menor cilindrada y consumo. De hecho, todos los vehículos que venda en China a partir de ahora contarán con la nueva generación de motores de la firma, a la par que emprenderá la renovación de todas las mecánicas en su gama hasta finales de 2015 con la tecnología Earth Dreams, en pos de ofrecer los índices de consumos y emisiones de CO2 más bajos de dicho mercado.
Eso, sin contar, que anda estudiando la posibilidad de montar un estudio de diseño de vehículos en China, así como expandir su red de proveedores, mientras construye en Dongfeng su segunda planta en el país y busca poner en marcha una tercera línea de producción en Guangqi, que iniciaría sus actividades en 2014.