Kia Soul, la originalidad en su máxima expresión

Creado: Dom, 24/01/2010 - 20:41
Créditos
Willy Hierro Caveda
Kia Soul, la originalidad en su máxima expresión

La primera vez que palpamos y apreciamos, bien de cerca, este original modelo de la marca coreana fue a principios del verano 2009, cuando Massimo Bonnano, presidente del Grupo FINAUTO International Ltd. y representante de Kia en Cuba, presentó su nueva gama para el mercado de la Isla. En aquella ocasión fue el Soul una de las mayores atracciones del evento.

Pero probarlo, por las principales avenidas de La Habana y por carretera rumbo a Varadero –el polo turístico más importante en la mayor de las Antillas-, es otra cosa. Es la oportunidad de disfrutar conduciendo un auto que no pasa inadvertido por donde quiera que vaya. Les comento –y no estoy exagerando-, que hasta nos preguntaron en un semáforo si se trataba de un coche eléctrico.

Es que el Kia Soul que probamos lo mueve un motor de Gasolina, con un desplazamiento de 1.6 litros y 124 CV de potencia, notablemente silencioso, sobre todo en ralentí. Además, su diseño exterior que mezcla líneas clásicas y futuristas, hacen que sea muy difícil su clasificación. Tiene algo de crossover pero no lo es, tiene cinco puertas pero no es un hatchback, tampoco clasifica como monovolumen. Kia, para no dar más vueltas al asunto lo denominó como un ”urban concept“.

Aunque algunas versiones del Soul vienen con llantas de 15 o 16 pulgadas de diámetro, este está equipado con unas llamativas llantas de aleación R18 de cinco rayos y calzado con neumáticos de perfil bajo 225/45, un detalle que lo hace más elegante.

Ahora bien, si el exterior del Soul es llamativo y controversial el interior es impecable, más aún por su amplio espacio, aunque la ergonomía es también uno de sus fuertes. Me encanta su panel de instrumentos, clásico hasta la médula, distribuido en tres círculos simétricos comandados por el velocímetro de mayor diámetro al centro, tacómetro a la izquierda y reloj de temperatura con indicador del nivel de combustible a la derecha, todos analógicos.

Por otra parte, la consola central nos hace regresar al modernismo con sistema de sonido que incorpora pantalla digital, lector de CD en MP3, entrada auxiliar, entrada de iPod y puerto USB. Además, están allí los mandos del aire acondicionado que regulan, en seis botones (tres giratorios y tres de opresión) la temperatura, el modo y el flujo de aire.

Sobre el reposabrazos del conductor encontramos múltiples controles: eleva vidrios eléctricos para las cuatro puertas, seguro de puertas centralizado, seguro para los vidrios de las cuatro puertas y control de ajuste de los retrovisores exteriores. Al volante y muy cómodo controlamos el equipo de sonido.

Rodamos de noche por la carretera Panamericana, donde pudimos apreciar el buen comportamiento del sistema de luces. La Panamericana, que une la capital con el puerto del Mariel es extremadamente oscura en la noche, pero en el Soul se va seguro gracias al alcance de sus faros delanteros y a las simpáticas y efectivas luminarias traseras.

Interesante, además, es la escotilla de cristal. Cuando hay sol intenso se cubre con el forro del techo y es como si no existiera, pero en días nublados y lluviosos o en noches estrelladas como en la que probamos el Soul, abrir la escotilla proporciona una vista agradable que nos da sentido de libertad y hace parecer al habitáculo aún más amplio.

Al día siguiente, por carretera rumbo a Varadero, el Kia Soul se desplaza como una alfombra, sobre todo cuando el alegre motor gira a 3 000 rpm y el cuentakilómetros oscila entre los 100 y 110 km/h. Pero si aceleramos un poco más, llevando la velocidad hasta los 130 km/h y el tacómetro hasta las 3 500 rpm sigue rodando tranquilo y silencioso pero responde mucho más rápido al pisar el acelerador.

Después de rodar varios kilómetros a 130 km/h llevamos el pie a fondo. Rápidamente alcanzamos los 170 km/h y el cuenta vueltas estuvo cerca de las 5 000 rpm. Tocamos los frenos  a esa velocidad y fueron muy efectivos, a pesar de que el sistema solo está equipado con discos en el tren delantero. Sin embargo, el ABS hace su trabajo impecable para que el Kia Soul se detenga firme y sin derrapes.

Visitamos el mirador de Bacunayagua, y desde allí fotografiamos el Soul atravesando el puente más alto de Cuba. Ya en Varadero, recorrimos toda la península de Hicacos, hasta la punta, y nuestro carro a pruebas fue la atención de infinidad de cubanos y turistas. Lo llevamos bien cerca de la playa y entramos en múltiples hoteles, siendo en el Blau, bellísima instalación turística, donde el Soul vistió sus mejores galas.

Cuando salimos desde las oficinas de FINAUTO lo hicimos con el depósito de combustible full, con una capacidad de 48 litros. Recorrimos unos 560 km en dos días y consumimos unos 40 litros, para un consumo aproximado de 14 km/l. Es importante destacar que en todas nuestras pruebas siempre llevamos funcionando el aire acondicionado.

De regreso a la casa de Kia en Cuba nos recibió Abel Cabrera Chiong, especialista y comercial de la marca coreana en la Isla, para recibir el coche a prueba. Escuchó atento nuestros comentarios respecto al Soul y nos puntualizó que este auto ha ganado múltiples galardones internacionales, entre los que destacan: Red Dot de diseño, Auto pequeño del año por FEMA, Premio de diseño en FIHAV, Five-Star Frontal Crash Safety Rating, entre muchos otros.

El auto usado ya había rodado unos 19 000 kilómetros, sin embargo durante la prueba funcionó como nuevo, como si fuese el equipo de Excelencias del Motor quien lo estuviera estrenando. En la edición 19 de Excelencias del Motor ya publicamos más información técnica de este simpático automóvil.

Créditos
Willy Hierro Caveda