Nissan potencia la diversión con el Smart BBQ Vehicle

Creado: Dom, 08/03/2015 - 23:36
Créditos
Ariel B. Coya
Nissan potencia la diversión con el Smart BBQ Vehicle

Apelando a su lado más okashi (divertido, en japonés), Nissan nos muestra la furgoneta eléctrica que podría llegar a fabricar con una parrilla para asados incorporada, un dron para hacer fotografías durante el viaje y karaoke, entre otras chucherías que harán de este el vehículo ideal para irse de paseo y disfrutar en cada descanso.

El concept Nissan Ultimate Smart BBQ Vehicle, que así se llama, tiene su origen en el versátil utilitario NV200, que desde su lanzamiento, orientado al transporte liviano de reparto dentro de las ciudades, ha causado una auténtica revolución en el mundo. No por gusto otra de sus variantes ya se impuso en el concurso lanzado por la ciudad de Nueva York para elegir sus taxis del futuro, relevando al clásico Ford Crown Victoria.

En ese sentido, este nuevo prototipo se basa en la versión eléctrica e-NV200, , que fue comercializado por Nissan en mayo del año pasado y se produce en forma exclusiva en la zona franca de Barcelona, con un motor de 80 kW que le proporciona una potencia de 107 CV, permitiéndole acelerar de 0 a 100 km/h en 14 segundos, con una velocidad máxima es de 120 km/h y una autonomía aproximada de 150 km.

Por si fuera poco, además del grill retráctil en el sector del maletero, esta furgoneta de suma originalidad ofrece un sinnúmero de sistemas, inventos y facilidades para pasar una buen día con familia y amigos, toda vez que el diseño incorpora un lavaplatos y una heladera que se alimentarán de la misma batería de litio que el motor.

Además, llevará adosado al techo un dron con cámara fotográfica incluida (perfecta para 'selfies'), e igual contará con un toldo tipo glorieta, un rociador de agua para refrescarse si hace mucho calor, una barrera antimosquitos (con ondas ultrasónicas), una pantalla que se conecta al móvil, un karaoke (infaltable en el relax japonés) y hasta un lavaplatos para después de la fiesta. ¿Quién no querría dar entonces una vuelta en ella?

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Ariel B. Coya