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Para este año Toyota ha dotado a su camioneta Tundra, de gran capacidad, de una mejor gestión en su motor estándar al añadir el DVVT-i (Dual Variable Valve Timing con ”inteligencia). De esta forma, el V6 de 4.0 litros de desplazamiento llega hasta los 270 CV de potencia máxima. Este paso pone a la Tundra en capacidad de responder a mayores desafíos y mejora, significativamente, su poder de arrastre y carga.
La versión 2011 de la Tundra parece tener en el tres su número mágico: ofrece tres estilos de cabina, tres opciones de largo en su plataforma, tres posibles longitudes de cama (o cajuela) de carga y tres posibles motores: el mencionado V6 y dos plantas V8, uno de 4.6 litros y 310 CV y el otro de 5.7 litros y 381 CV. Todo ello se configura según las necesidades y el modelo, pues tiene dos versiones de terminación: la Tundra y la Tundra Limited.
Performance
Como mencionamos, el motor base mejora su respuesta de forma significativa pues la cifra actual rebasa, en mucho, los famélicos 236 CV anteriores. De igual forma, el par motor se ve incrementado hasta los 376 Nm, desde los 360 Nm disponibles hasta ahora. Para complementar estas mejoras el V6 ahora está acoplado a una transmisión automática de cinco marchas y capacidad secuencial. Los motores V8 se mantienen inalterables en sus cotas, y ambos se ofrecen en combinación con una transmisión automática de seis cambios.
La estructura de la Tundra se ha cuidado en extremo, y Toyota describe su chasis como Triple Tech frame, por su configuración acorde a cada sección del vehículo: frente, cabina y cama de carga. Los frenos 
ventilados de discos a las cuatro ruedas están complementados por el ABS; la Distribución Electrónica de la Potencia de Frenado (EBD), y la Asistencia al Frenado (AB), todos estándar. Además, trae diferencial anti-deslizamiento (Auto LSD) el cual permite una mayor capacidad de marcha en caminos de arena o grava profunda, u otros donde el agarre de los neumáticos sea disparejo o imperfecto.
Como es de esperar en un vehículo de alta gama del fabricante japonés existen muchos otros elementos de alta tecnología que hacen de la versión 2011 de la Tundra una opción viable para quienes necesiten una camioneta dura, capaz de hacer frente al trabajo fuerte.