A toda máquina, el grupo alemán Volkswagen se sigue superando con el tiempo, en pos de convertirse en el primer fabricante mundial de automóviles para el año 2018, y justo en ese sentido ha quebrado otro récord suyo, al vender en todo el mundo 6,17 millones de unidades durante los ocho primeros meses del año, lo que supone un aumento del 4,5% frente al mismo período de 2012.
No en vano, como destacó el responsable de ventas de la multinacional, Christian Klingler, Volkswagen está ”en buena forma“ pese a la incertidumbre económica que ahora mismo afecta al sector automotriz, por lo que no dudó en calificar de satisfactorios los resultados comerciales hasta ahora, pese a la caída que sufrieron sus entregas en Europa, con 2,39 millones de nuevas matriculaciones desde enero (-3,3%).
Aun así, durante el pasado mes de agosto, las ventas mundiales de Volkswagen alcanzaron los 720 400 unidades (+0,1%), igualando prácticamente de 719 500 registradas durante el mismo mes de 2012, gracias al crecimiento sostenido que ha logrado el consorcio de Wolfburgo a lo largo del año en Norteamérica, con 593 700 unidades (+10,9%) y sobre todo China, el mayor mercado automotriz de la actualidad donde ha concentrado un tercio de su volumen actual de
ventas totales con 2,05 millones de vehículo (+17,9%).
De ahí que, según Klingler, bregando contra viento y marea, en Volkswagen ”esperamos que las entregas en el ejercicio completo superen las registradas el pasado año“. Una meta plausible para un fabricante que se supera día a día.