Volkswagen sigue perfilando su gama del futuro y en el Salón de Shanghai acaba de presentar el que será el tercer miembro de su nueva familia de vehículos eléctricos a partir de 2020: ni más ni menos que el I.D. Crozz.
Si en el Salón de Detroit de 2016 develó, con el concepto I.D. Buzz, una futurista reinterpretación de la icónica Bulli y luego en París el I.D compacto, ahora llegó el turno para este otro modelo basado en la plataforma modular MEB que la marca alemana ha desarrollado para crear coches respetuosos del medio ambiente .
Y lo cierto es que de antemano nos encontramos con un prototipo de estética rompedora, que prefigura un crossover o CUV, aunque en realidad es un ”mestizo“ capaz de combinar la carrocería alta y robusta y las cuatro puertas de los SUVs con la silueta de los cupés.
Justo así, posee 4,62 metros de largo (un poco más que el Volkswagen Tiguan), pero su configuración mecánica, con las baterías integradas bajo el piso y un motor eléctrico en cada eje, le permite liberar mucho espacio para los pasajeros, al punto de tener una capacidad similar a la de un Passat.
Aunque su mayor baza sin duda radica precisamente en el kit eléctrico que incluye unas baterías de ion-litio de 83 kWh de capacidad –casi tres veces más que las del Nissan Leaf actual (30 kWh)– para otorgar una autonomía de 500 kilómetros.
Por si fuera poco, se pueden recargar en media hora al 80%, por lo que basta tomarse un café y descansar un rato, para que el I.D. Crozz. esté listo para hacer otros 400 kilómetros. Entretanto, sus dos propulsores ofrecer tracción 4×4 eléctrica, adosados cada uno a su propia caja de cambios, y suman 306 CV que galopan a una velocidad tope de 180 km/h.
Por lo demás, el I.D. Crozz anticipa también las últimas funciones de conducción autónoma que el consorcio germano espera ofrecer con el sistema VW Autopilot. Este se activa pulsando durante tres segundos un botón en el volante, que se ocultará bajo el salpicadero, a la vez que varios radares y sensores toman las riendas del manejo para seguir el viaje mientras el conductor se dedica a otra cosa.
Asimismo, este prototipo viene con una instrumentación y mandos basados en pantallas táctiles y gestuales, capaces de almacenar en la nube el perfil del usuario, con toda la información y gustos personales, desde su música favorita hasta la temperatura de climatización, amén de crear una llave electrónica activable desde el teléfono móvil que adaptará todo a su conductor apenas este se acerque al coche.