A mediados del mes de noviembre, luego de un proceso creativo de alrededor de un año, China puso en marcha el primer barco ciento por ciento eléctrico en un viaje inicial por las aguas de Guangzhou. La embarcación -aunque anteriormente el transporte marítimo ha apostado por este tipo de tecnología- constituye la primera de su tipo.
El buque, construido en los astilleros de la empresa Guangzhou Shipyard International, tiene una batería de litio con capacidad de 2.400 kWh, 70,5 metros de eslora y 13,9 de manga; su peso es de 600 toneladas y peculiarmente navega a una velocidad máxima de 7 nudos (12,8 km/h). Además, cuenta con una tripulación de 6 personas y dispone de 2 motores eléctricos de 160 kWh cada uno.
Los servicios de la embarcación estarán dirigidos a la transportación de carbón, de punto a punto, a través del famoso Río de las Perlas, en la provincia de Guangdong, donde se encuentra una zona rodeada de viviendas y es importante disponer de un transporte más sostenible.
Una de las curiosidades de este diseño es el uso de motores eléctricos y baterías de litio, lo cual permite utilizar más espacio para ubicar el material a transportar en la embarcación, que llega a las 2 mil toneladas.
Según explican los promotores del diseño de la nave, pertenecientes a la firma Hangzhou Modern Ship Design & Research Co., y desde el criterio de su CEO, Huang Jialin, demoró más de un año construir el barco.
Este singular buque, con una recarga completa de batería que demora solo 2 horas para llenar su capacidad, logra un recorrido de 80 km, distancia y tiempo suficientes para descargar y cargar el carbón que traslada el barco. De igual modo, expertos en el tema, exponen una postura positiva ante esta innovación, pues las ventajas son muchas y van desde evitar la quema de miles de litros de combustible y la emisión de gases carbónicos, hasta impedir la contaminación del aire en esa región de China.
