
Con detalles estéticos exclusivos, como fundas de asientos intercambiables, el Ford Puma Titanium X se presenta en el Salón del Automóvil de Frankfurt.
La imagen del Titanium X es más campera y robusta, lo cual suma argumentos para que el B-SUV de Ford se abra un hueco en esta categoría tan competida, donde se tine que medir con modelos como Citroën C3 Aircross, Kia Stonic, Nissan Juke o Peugeot 2008, entre otros.
Para esta ocación, Ford Puma trae en su nueva versión detalles estéticos exclusivos y un completo equipamiento enfocado a la seguridad, la conectividad y el confort, además de la ya conocida variante mecánica, con propulsor gasolina Ecoboost de 1.0 litro, potencia de entre 125 y 155 CV, ambas apoyadas en un motor-generador de 11,5 kW y batería de 48 V.
En cuanto a tecnología, destacan las fundas para los asientos intercambiables, que pueden retirarse y lavarse, lo que lo convierte en el primer modelo de la marca en disponer de este sistema.
Y en el momento de la compra, si lo desea, se puede añadir opcionalmente unas fundas de repuesto de diferente tonalidad, por lo que pueden cambiar la tapicería del habitáculo a conveniencia.
Los asiente ofrecen masaje lumbar, volante multifunción con efecto cuero o un marco que imita la madera para la instrumentación y la consola central. El sistema multimedia SYNC 3 de Ford viene de serie, compatible con Apple CarPlay y Android Auto, y va combinado con un sistema de sonido de 575 vatios con diez altavoces B&O.
Por supuesto, no faltan sistemas de asistencia a la conducción, entre los que se destaca el asistente de mantenimiento de carril con función de detección del borde de la carretera, sistema de pre-colisión con detector de peatones (apoyado en una cámara de visión con ángulo más amplio), control de crucero adaptativo Stop & Go o reconocimiento de señales de tráfico.
La estética exterior del Ford Puma Titanium X presenta llantas de aleación de diseño exclusivo de 18 pulgadas, con diez radios y en tonalidad Gris Perla.
Asimismo, dispone de un buen conjunto de cromados, presentes en el marco de la parrilla delantera, en diseño de panal de abeja, o en el de los faros antiniebla.
Los retrovisores exteriores son del mismo color que la carrocería, con intermitentes integrados y dispone de luces que iluminan el suelo cuando se abre las puertas delanteras.