
En la ciudad de Chongqing, conocida como China’s “8D magic city” por su arquitectura vertical y trenes que atraviesan edificios, se presentó hace solo unos días el primer monorriel temático de panda, un tren elevado de tipo straddle con decoración blanca y negra que recrea el rostro del emblemático oso gigante.
Más que un vehículo de transporte, el monorriel busca convertirse en símbolo cultural, realzando la relación de Chongqing con este icónico animal. Así, el exterior del tren presenta un diseño minimalista: líneas negras perfilan una cabeza de panda risueña, mientras las fachadas laterales exhiben ilustraciones continuas del animal. En otras palabras, el tren monorriel parece salido de un cuento.


En el techo, se observan grandes ventanales, así como una claraboya que permite a los pasajeros contemplar el paisaje escarpado y las estructuras icónicas de la ciudad. Su interior es todo un «universo panda», pues sus asientos de cuero son en forma de osos, agarraderas con cabezas de panda, vitrinas de recuerdos y una figura de peluche de 1,5 m que funciona como spot fotográfico central. Una fusión perfecta entre ingeniería moderna y cariño por uno de los símbolos más queridos de China.
Según sus diseñadores, este tren único en su especie promete a los pasajeros una experiencia cultural y turística inolvidable.


