Hace unos años se encontró un modelo casi único del Aston Martin DB2/4 en Cuba, uno de los dos que se construyó con motor de competición, pero bajo su capó esperaba una sorpresa.
La noticia original no es reciente, sin embargo (será la cuarentena que nos permite ahora dedicarle nueva atención a aquello que hace tiempo solo nos permitía una simple mirada) ha vuelto a acaparar la tención de mucho internautas.
Y es un que un Aston Martin DB2/4 no es cualquier auto y que se encuentre en Cuba, provoca todavía más sorpresas.
Se trata de un modelo emblemático, uno de los dos hechos para carreras realizado en esas fechas por la compañía británica. Se logró descubrir que realizó el viaje a las Antillas en 1958. Solo eso. De cómo llegó a la Isla poco se sabe y en su ficha oficial aparece una inscripción demasiado genérica para una investigación, únicamente dice “Cuba?”.
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Lo encontraron en un cobertizo o garaje cercano a La Habana, y fue fotografiado por el periodista Jonathan Ward, de la revista Road&Track, quien se encontraba realizando un reportaje sobre la cultura automovilística de Cuba.
Por supuesto, era más carrocería que auto, estaba oxidado y polvoriento, con las señales de décadas en las que no se ha movido. Pero el coche es salvable, o eso dicen los especialistas, más aún en Cuba donde los mecánicos con pocos presupuestos son capaces de hacer maravillas.
Aunque la mayor sorpresa esperaba en su interior, pues nada se sabe del motor de seis cilindros en línea que lo hacen prácticamente único: bajo su capó había un cuatro cilindros carburado procedente de un Lada 1200.
¡De esa costumbre cubana de “tunear” autos para su funcionalidad no se salvó ni el Aston Martin DB2/4! Puede que haya servido varios años más con un motor ahorrativo.
Como fuere, es otra de las maravillas del museo rodante cubano. ¿Cuántos quedarán por descubrir?
📷: Diario Motor y Cubadebate
