
Esos peculiares sucesos, donde el mar es protagonista y constituye la plataforma ideal para la realización de proyectos novedosos, armonizan cada día más con el imaginario de las personas.
Ya inició el mes de febrero y por estos días el Logos Hope o la librería flotante más grande del mundo, como también se le conoce, inicia su visita al puerto de Cartagena, en Colombia.
El gran buque, cuyo nombre en español puede traducirse como La esperanza del conocimiento, y en el cual han recibido –el capitán Dirk Wander Colenbrander y su numeroso equipo– a más de 46 millones de personas en más de 150 países, posee 132 m de eslora, 21 de manga y 5.22 de calado.
Esta embarcación, que cuenta con la misión de transportar y poner a disposición de sus visitantes en cada puerto alrededor de 5 mil libros, tiene una tripulación compuesta por 400 voluntarios de 60 naciones.
Logos Hope pertenece a la organización sin ánimo de lucro GBA Ships, registrada en Alemania, y desde que en el año 1970 asumió este tipo de acciones, mantiene sus objetivos fundacionales: compartir conocimiento, ayuda y esperanza alrededor del mundo.
En cada puerto donde atraca esta inmensa y distintiva librería, los visitantes pueden adquirir literatura de buena calidad y diferentes temáticas a precios muy asequibles, además de poder disfrutar de las variadas ofertas y eventos culturales a bordo del barco (conferencias, donaciones de libros, actividades infantiles).
El periplo de este barco-librería flotante ha incluido zonas como Las Palmas de Gran Canaria, Santa Cruz de Tenerife, Santo Domingo, Barranquilla, Santa Marta y –solo por ahora– hasta el 25 de febrero Cartagena, siempre bajo la premisa no solo de constituir el evento literario marino más sorprendente del mundo, sino también de promover cultura e instrucción.