
La aceleración, además de la velocidad, es pasión. Así, existen múltiples modalidades de carreras callejeras y donde el cuarto de milla es uno de los más populares. Pero el Standing Mile gana cada vez más adictos al combinar velocidad tope y aceleración. Se trata partir de parado y recorrer una milla (1.6 km) en el menor tiempo posible; además, se marca como récord la velocidad máxima alcanzada en su paso por meta. Aunque muchos lo han intentado, con diferentes marcas y modelos, es el Ford GT quien manda.
Lo sorprendente es que dos autos Ford GT con mínimas transformaciones visibles han marcado velocidades de ensueño para un auto de calle con motor de combustión interna. El primero, preparado por la casa Performance Power Racing, sorprende por el incremento de potencia gracias al gigantesco turbocompresor que elevó la fuerza desde los 550 CV hasta los 1 650 CV.
El récord pertenecía al Dodge Viper, que pasó por meta a 372.82 km/h. Sin embargo, el Ford GT Performance Power Racing hizo polvos esa cifra al pasar por la raya de sentencia a 407.12 km/h. Este Ford es casi idéntico a uno de serie, del cual se diferencia por unas nuevas llantas y el spoile trasero; claro, el motor queda tapado.
Así las cosas, este fabuloso récord duró lo que un bombón en la puerta de un colegio. Otro Ford GT, esta vez preparado por Heffner Performance y probado en el mismo evento, Miami Mile, minimizó la hazaña de Performance Power Racing.
También con mínimas transformaciones visibles, donde destaca un nuevo difusor, el Ford GT Heffner esconde todo su poder bajo el capó. El propulsor V8 de 5.4 litros de desplazamiento, sobrealimentado por dos turbocompresores extrapotentes, llevó el velocímetro hasta los insospechados 429.695 km/h. Lo sorprendente es que lo consiguió con neumáticos de serie, no aptos para tales velocidades, un factor que – para no destrozarlos- condicionó su lenta salida.
El intento en el Texas Mile, utilizando un Lamborghini Gallardo Superleggera y preparado por Underground Racing pasó sin penas ni glorias. No fue suficiente, para romper el récord, colocarle un kit de doble turbo en el motor V10 de 5.0 litros de cubicaje que eleva la potencia a más de 1 000 CV. Los 400.2 km/h registrados en su paso por meta quedaron muy lejos de la nueva marca a batir.
De cualquier manera vale el intento. A fin de cuentas, los récords están ahí para quebrarlos. Estaremos atentos.
Noticias relacionadas
El nuevo auto de serie más rápido del mundo
Los autos más rápidos del mundo