Cariño, tenemos otra vez un coche en el salón
Aunque parezca mentira, hay gente como Jim Curtis, un ciudadano americano residente en Havervill, Massachusetts, que no está del todo cómodo en su salón. ¿La razón? Cada vez que escucha un frenazo teme no sólo por su casa, también por su vida. La pasada semana el señor Curtis estaba tecleando en su ordenador cuando escuchó el chirriar de unos neumáticos. Apresuradamente se levantó del lugar donde estaba sentado y se puso a cubierto. Un Dodge Durango irrumpía en su salón, ¡y ya es la quinta vez que le ocurre! Veamos todos los detalles de la desafortunada historia.