El primer ministro ruso se subió a un bólido de Fórmula Uno para darle una vuelta, alcanzando velocidades de casi 240 kilómetros por hora (150 millas por hora).
Putin firmó el mes pasado un acuerdo con Bernie Ecclestone, director de la F1, para traer a Rusia una carrera de ese serial automovilístico a partir del 2014. Su prueba de manejo del domingo, difundida en la televisión, podría ayudar a incrementar el gusto por este deporte en el país.
Con su nueva proeza, Putin sigue dando lustre a la imagen de hombre de acción que ha cultivado desde hace tiempo, desde su vuelo a Chechenia en el 2000 a bordo de un avión caza.
A lo largo de los años, el primer ministro ha sido visto derribando adversarios en la colchoneta de judo, montando a caballo con el pecho descubierto a través de las montañas y nadando en estilo mariposa en un río de Siberia.
Este verano mostró sus habilidades disparando dardos con una ballesta a una ballena gris mientras su embarcación se sacudía en un mar agitado, y también tomó los controles de un avión de bomberos con el fin de arrojar agua sobre incendios forestales que se propagaban hacia villas ubicadas al sur de Moscú.
Después de recibir instrucciones el domingo por parte de un equipo de la Fórmula Uno, Putin se puso al volante de un automóvil amarillo Renault vistiendo un traje de piloto profesional y lo condujo por un caminovacío cerca de San Petersburgo. En un momento dado tuvo un trompo, pero recuperó el control.
Cuando terminó su recorrido y se le informó la velocidad máxima que alcanzó, sonrió y dijo en inglés: "Para ser la primera vez, está bien". Los autos de Fórmula Uno pueden alcanzar velocidades superiores a los 320 kph (200 mph).
Bajo el acuerdo con la F1, Rusia realizará carreras de Gran Premio cerca del poblado turístico de Sochi, en el Mar Negro, donde además se llevarán a cabo los Juegos Olímpicos de Invierno del 2014.