El reencuentro de Fernando Alonso con la victoria, unos cinco años después de la más reciente, está tal vez a unas horas de producirse. Si no, a unas semanas, o en el peor de los casos, a algunos meses.
Correr para el mejor equipo del mundial y con un coche ganador, como hace mucho no tiene, es finalmente una realidad. De luchar por marcar algunos puntos, como lo ha hecho en cada gran premio de 2018, pasa a pelear poles, victorias y títulos.