El divorcio de Tech 3 con Yamaha para la temporada venidera puso en jaque a la marca de Iwata y peligró que pueda mantener sus cuatro motos para la venidera temporada. El desespero de Lorenzo por regresar a una montura japonesa le avivó las esperanzas a la de los diapasones para armar un equipo satélite con atención directa de la fábrica.