Honda ha presentado una patente asombrosa: un casco con reconocimiento facial necesario para desbloquear la moto del usuario y evitar así que la roben.
Según explica la marca japonesa, llevar una llave a cuestas puede ser engorroso, son fáciles de perder y no las pueden robar en un descuido. Sin embargo, con un casco esto está resuelto (o al menos eso afirman).
El funcionamiento del casco es básico, detalla la patente: tiene una cámara que escanea el rostro de quien se lo pone. Si la cara es la del propietario, la moto se desbloqueará y el piloto podrá comenzar la marcha.
Igualmente presenta otras potencialidades antirrobos. El ladrón no podrá encender la moto porque el casco no lo reconocería y, por tanto, no podría arrancarla. Y ahí no termina, pues en el caso de que el conductor al que pertenece el casco se aleje de su scooter durante más de un minuto estando parado el motor, se bloqueará la moto para que nadie pueda utilizarla.
Honda asegura que tanto el casco como el scooter se venderán juntos, lo cual significa que, si el vehículo tiene varios usuarios, cada uno tendrá que tener un casco distinto ya que el mismo solo reconocería a una sola persona.
El scooter será eléctrico y es un vehículo nuevo en el que está trabajando Honda, que aseguran es distinto a lo que han hecho hasta ahora. Pero para verlo habrá todavía que esperar.
De momento, es solo una propuesta de patente de la marca que están desarrollando, y puede despertar sospechas o alegrías. Algunas preguntas serán: ¿te puede reconocer al 100% el casco?, ¿si llevas gafas de sol te reconoce igual?, ¿cómo reconoce el rostro del usuario?, ¿habrá un sistema añadido por si se estropea la cámara?, ¿cuánto costaría el casco o el conjunto con el scooter eléctrico?
