Citroën C4 Sedán, por diferente no deja de ser bueno
Aunque a simple vista parece un sedán clásico, cuando te encuentras en su interior comienzas a apreciar la diferencia. Digo esto porque no es común un volante que mantenga estático su interior y un salpicadero donde se ausentan los habituales relojes circulares tras el timón. El tacómetro, pequeño y estrecho sí está tras el volante, pero el velocímetro, odómetro, registro de temperatura y nivel de combustible, entre otros, se ubican en una pantalla central toda digital y monocromática.