El Yukon resultó el primer vehículo en producción con el sistema de doble propulsión híbrida.

Los bólidos de competición se han sumado, por derecho propio, a la categoría de clásicos.  Sus épicas hazañas, junto a las de sus pilotos, forman parte de la apasionante historia del automóvil.  El Lola Racing Cars Group gozó de merecido protagonismo hace varias décadas, veamos uno de sus magníficos coches. El inglés Eric Broadley fue de los primeros en combinar las ventajas de un chasis ligero de motor central con un V8 norteamericano para los bólidos de competición.

Ya es oficial la preparación realizada por MTM al Audi RS6. Destaca en ella el incremento de potencia y la disminución de peso, para convertirlo en arma letal sobre el asfalto. Razón por la cual, se ha colocado al conductor dentro de una jaula de seguridad y donde los asientos son de fibra de carbono con cinturones de seis puntos. Por fuera, en la carrocería, está presente la fibra de carbono en unos calculados faldones, los que trabajan la estabilidad del superdeportivo.

BMW se ha convertido en la firma automovilística más valiosa del mundo, con un valor de 21.816 millones de dólares (16.527 millones de euros al cambio actual), según se desprende del informe BrandZ 2010 con las cien marcas más valiosas del mundo y su diferenciación por sectores.

Pese a que el valor de su marca desciende un 9 por ciento en relación al anterior informe, BMW desplaza a la segunda posición a Toyota.

Lo que por momentos parecía una carrera de agárrame si puedes, a favor de Dani Pedrosa, quien salió desde la pole y que rodó casi todo el tiempo delante, se convirtió en las últimas vueltas en una batalla
espartana entre dos. Dani y Lorenzo pusieron las gradas a hervir luego de los encontronazos en la penúltima vuelta. Finalmente fue Lorenzo el de mayor corazón para llevarse una victoria impresionante.

Lleva tantos años entre nosotros, que la silueta del Lada Niva ya podría ser considerada un monumento ruso patrimonio de la humanidad como el Kremlin y la Plaza Roja de Moscú.

La aceleración, además de la velocidad, es pasión. Así, existen múltiples modalidades de carreras callejeras y donde el cuarto de milla es uno de los más populares. Pero el Standing Mile  gana cada vez más adictos al combinar velocidad tope y aceleración. Se trata partir de parado y recorrer una milla (1.6 km) en el menor tiempo posible; además, se marca como récord la velocidad máxima alcanzada en su paso por meta. Aunque muchos lo han intentado, con diferentes marcas y modelos, es el Ford GT quien manda.