El próximo domingo empieza la temporada
Melbourne, como en los últimos años, acogerá el primer GP de la temporada. La continuidad de la Fórmula 1 en la isla continente está amenazada por el principal de la F1, Bernie Ecclestone, quien le exige a los organizadores del GP australiano una carrera nocturna a partir de 2010. Esto tiene que ver con la diferencia horaria con Europa, donde se mueven los mayores intereses de la prueba reina del automovilismo.